Dónde y Cómo empezar la Práctica. Lo primero a tener en cuenta.

Empezamos dónde y cómo estamos en ese momento de inicio y dependiendo de cuales sean nuestros intereses podrá ser por la práctica de: posturas, respiración, meditación …

Realmente no es importante por dónde comenzamos (si bien el Yoga Clásico propone un proceso de 8 estadíos progresivos), lo importante es tomar la decisión de comprometernos con nuestra práctica.

Y a medida que vayamos progresando en ella, independientemente desde dónde hayamos comenzado, nos iremos dando cuenta de la naturaleza holística de nuestro ser, y entonces de la necesidad de un abordaje integral.

El Yoga Clásico enfatiza todos los aspectos de la vida humana, nuestras relaciones con los demás, nuestro comportamiento, salud, respiración, así como el camino hacia la meditación.

Lo primero a tener en cuenta en nuestra práctica será que:

- Así como desde lo biológico existe la “individualidad bioquímica", que hará la diferencia cuando nos fijamos en lo que nos mantiene saludables y lo que nos hace enfermar y sufrir la enfermedad. Determinando esto que sea más importante saber qué tipo de persona tiene una enfermedad, a saber qué tipo de enfermedad tiene una persona.

- Esa nuestra biología única, afectará inevitablemente a nuestra práctica de yoga, haciendo que sea más importante saber qué tipo de practicante está haciendo una postura, que saber qué tipo de postura está haciendo el practicante.

Si uno lo piensa un poco fácilmente puede llegar a esa conclusión, pues cada uno de nosotros tiene una determinada altura, peso, edad, presión arterial, frecuencia cardíaca, una determinada relación entre la longitud de los brazos y la de la columna vertebral, estructura de la pelvis, forma en la articulación de la cadera, capacidad de rotación de los fémures, curvatura en la forma de las piernas ...

Y así, las variaciones abarcan todas nuestras estructuras como son el cerebro, nervios, músculos, tendones, huesos, sangre, órganos, glándulas endocrinas, etc ... Estas estructuras suelen variar enormemente de un individuo a otro.

Todo lo cual determinará que, habrá cosas que podemos hacer en este momento, habrá cosas que seremos capaces de hacer con el tiempo, y que habrá cosas que nunca seremos capaces de hacer.

Esto obviamente no será una crítica a nuestras habilidades o una falla que necesita ser corregida, esto simplemente será la realidad de nuestra existencia.

No podremos catalogar estas características singulares como normal o anormal, bueno o malo …

Esto simplemente representa nuestra singularidad y determinará nuestras posibilidades en la práctica.

En definitiva, somos únicos, lo que podemos hacer es único y sobre esa base evolucionará nuestra práctica de Yoga.

#ReflexionesacercadelaPráctica