Estudio de Yoga

La invitación es a permitirnos sentir y disfrutar, la experiencia de la práctica de Yoga.

Redescubrir nuestro cuerpo a través de la observación de las sensaciones que se van despertando, explorando las limitaciones, haciendo concientes nuestros hábitos posturales.

Buscaremos construir una práctica, que tendrá como objetivos:

- Mantener (recuperar) la movilidad de la columna vertebral (nuestro centro estructural y energético) y de la caja torácica, evitando la tendencia a encorvar la espalda, para promover una mejora en la función respiratoria, además de permitirnos  conectar con el espacio del corazón.

- Fortalecer los músculos, en particular aquellos que ayudan a proteger y apoyar la espalda baja, para que nuestra estructura sea más equilibrada, estable y eficiente.

- Ampliar el rango de movimiento de las articulaciones, para mejorar la circulación sanguínea y energética, además de tener un mejor desempeño funcional en lo cotidiano.

- Trabajo neuromuscular, para desarrollar nuestra capacidad de equilibrio:

• Los patrones de movimiento: tenemos  patrones que repetimos durante años, día tras día, la idea es hacerlos concientes y a partir de allí intentar reemplazarlos por otros más saludables.  Preparando así al cuerpo para lo inesperado.

• El reclutamiento muscular: Cuando desarrollamos la agilidad y el equilibrio, desafiamos a los músculos de la parte delantera y trasera de las piernas a trabajar juntos, armoniosamente, además de los músculos del torso, que también ayudan a sostener el equilibrio.

• El equilibrio dinámico: La capacidad de mantener el equilibrio a través del movimiento.

• La velocidad y el tiempo de reacción: La capacidad del cuerpo o partes del cuerpo para moverse rápidamente.

- El entrenamiento de la fuerza, para mejorar la capacidad de los músculos para reaccionar contra la gravedad.

- Trabajar la concentración mental y con ello favorecer la memoria.

- Respirar de manera conciente. Através de la práctica de técnicas respiratorias lograr la mejor oxigenación y reparto de la energía en el cuerpo, promoviendo el aumento del calor interno y el fuego digestivo, facilitando así, la eliminación de toxinas. Mejorando en definitiva el metabolismo.

- Revitalizarnos, transformando nuestro estado anímico y ampliando las perspectivas para vivir esta etapa de una manera diferente.

Permitiéndonos sentir serenidad y dándonos la posibilidad de  cultivar cualidades que suavicen nuestro ego, para poder, dirigiendo la atención al espacio de nuestro corazón, con actitud meditativa,  reconocer y sentir la presencia de nuestro ser interior.

- Propiciar la  relajación y el descanso para regenerar nuestro cuerpo y mente.

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La propuesta es desarrollar, cada vez, una práctica suave, de ritmo fluido.

Respetando siempre las pausas que naturalmente se impongan, para mantener presente nuestra atención.

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